La barbacoa sin barbacoa surge como una solución para aquellos que viven en pisos y no pueden permitirse disponer de este espacio o incluso para aquellos que todavía no disponen de esta zona de ocio en casa.
Como consecuencia, muchos acaban dejando de lado este tipo de actividades, y existen algunas soluciones prácticas, además de comprar comida preparada.
Así que ven a descubrir más.
Las placas son ideales para aquellos que realmente necesitan prescindir del humo y no pueden crear una barbacoa en el suelo.
Por eso, puedes comprar esta placa de hierro y colocarla encima de tu estufa, que te servirá como base, o como parrilla.
Un consejo interesante es dejar siempre calentar bien el plato antes de poner la carne, para facilitar la preparación.
Además, puede agregar verduras, quesos y otras porciones allí.
Dado que no usa humo y casi no usa grasa, descubrirá que no tiene que preocuparse demasiado por el desorden.
Un consejo interesante es comprar placas del tamaño de tu estufa, que lleven un máximo de dos “quemadores”.
De esa manera, el fuego realmente atrapa el plato y hace que tu barbacoa sea más fácil.
Un consejo interesante que pocos conocen es que la olla a presión puede funcionar como una barbacoa.
En definitiva, la forma y el material de estas sartenes te permiten crear una especie de mini espacio para asar carnes y otras recetas.
Básicamente, lo que necesitarás es carbón, papel de aluminio, una sartén y la carne.
Entonces, tomas el carbón y lo envuelves en papel de aluminio, cubriendo el fondo de la olla.
Luego, colocas la carne sobre el papel aluminio, sin tocar los bordes de la cacerola, la cierras y la llevas a ebullición.
El tiempo medio de preparación es de 20 minutos, después de presionar.
Las parrillas eléctricas están entre los inventos más funcionales para aquellos que quieren tener una barbacoa sin parrilla y sin suciedad.
En resumen, funciona con electricidad y garantiza ese aspecto carnoso increíble, además de ser fácil de usar.
La base de estas parrillas utiliza agua, lo que evita que caiga grasa en el aparato, suciedad, olores fuertes e incluso cualquier atisbo de humo.
Sin embargo, son opciones pequeñas y, casi siempre, llevan algo de tiempo asegurar la preparación de las carnes.
De esta forma, es fundamental empezar a poner la carne un poco antes de la hora a la que quieras comerla y aprovechar otras recetas y salsas mientras asas.
También puedes encontrar en el mercado algunas parrillas eléctricas, que funcionan de manera similar.
El horno es una opción interesante y práctica para ahorrar tiempo en la cocina.
Generalmente, el consejo general es optar por piezas de carne más grandes, condimentadas y envueltas en papel de aluminio.
Luego simplemente colóquelo en una bandeja para hornear y déjelo hornear.
Sin embargo, otro consejo es crear una especie de cuadrícula.
Por lo tanto, vas a utilizar una parrilla, colocándola debajo de una asadera con una porción de agua que cubra apenas el fondo.
Luego coloca las carnes encima de la parrilla, como la parrilla eléctrica, pero en el horno.
Al rato, la carne se va asando poco a poco, chorreando en la sartén, en el agua, sin ensuciar nada.
Por último, un consejo es para los que tienen espacio en casa y quieren apostar por la improvisación.
Por lo tanto, necesitará bloques o ladrillos de cemento, papel de aluminio y una parrilla.
Simplemente cubra el piso con papel de aluminio para evitar que se manche o algo por el estilo, que es una opción. Luego, haz una especie de “casita”, creando un cuadrado con los bloques y ladrillos.
Entonces, pon el carbón, enciéndelo normalmente y coloca la parrilla encima.
Un consejo interesante es utilizar botes de hojalata, los más pequeños hechos con botes de pintura o incluso los grandes, que funcionan bien y que incluso pueden llegar a ser portátiles.
Incluso puedes encontrar varias opciones geniales en Internet.
Por último, un consejo interesante es utilizar la freidora eléctrica para preparar pan de ajo y otras recetas e incluso apostar por guarniciones a la barbacoa buenísimas.
De esa manera, tendrás una comida increíble, hecha en casa y sin tener que ir a un asador.
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