En este post separamos los mejores toppings para dulces para que empieces a atreverte más en la cocina y transformar tus recetas.
Así que no pierdas más tiempo y descubre ahora los secretos más prácticos. ¡Verificar!
Ganache 1#
Ganache es uno de los toppings más sorprendentes y fáciles de preparar, ya que solo lleva dos ingredientes: barras de chocolate y nata.
Esta apuesta sirve para diferentes tipos de recetas, como pasteles y tartas, o incluso para ese chupetín de taza, tortitas y mucho más.
En la práctica, usarás alrededor de 300 g de chocolate por cada caja de crema.
Sin embargo, puede cambiar las medidas según su gusto personal.
En resumen, cuanto más chocolate, más consistente y firme es la ganache.
Un consejo especial es apostar por el chocolate negro para recetas más dulces, evitando que el dulce se vuelva empalagoso.
Al mismo tiempo, derretir siempre el chocolate al baño maría, pero esperar a que se enfríe un poco antes de añadir la nata, sobre todo si está fría.
2# Fondant entre puntas para cobertura de dulces
El fondant es una receta blanca sencilla, que se parece un poco al fondant porque es fácil de manipular.
Asimismo, es una receta ideal para dulces que se van a quedar fuera de la nevera, ya que no necesita estar refrigerada en todo momento y mantiene su “firmeza” durante más tiempo.
Entonces, para prepararlo, solo necesitas:
- 1 taza de azúcar glas
- 3-4 cucharadas de leche
La preparación también es muy sencilla, se empieza mezclando los dos al baño maría hasta que se mezclen por completo.
Después, solo utilízalo para cubrir el caramelo.
3# Práctica salsa de chocolate
Este sirope de chocolate recuerda mucho al que se usa en los pasteles de zanahoria, que es más cremoso y ligeramente duro por encima.
Por tanto, puedes elegir el punto ideal, dejando que espese mucho o haciéndolo más líquido.
Para eso, necesitas:
- 2 cucharadas de mantequilla sin sal;
- 5 cucharadas de leche;
- 4 cucharadas de azúcar;
- 4 cucharadas de chocolate en polvo.
El consejo es elegir chocolates más nobles, como Dois Friars.
La preparación es bastante sencilla, basta con poner todos los ingredientes en una sartén, mezclar bien y encender el fuego.
Sigue removiendo hasta llegar al punto deseado.
4# Crema de mantequilla básica
Buttercream es la famosa crema de mantequilla y una de las más utilizadas para decorar cupcakes.
Al fin y al cabo, es una opción más ligera y con un toque más aterciopelado que lleva los siguientes ingredientes:
- 1 taza de mantequilla sin sal (temperatura ambiente);
- Media taza de leche;
- 1 cucharadita de esencia de vainilla;
- 6 tazas de azúcar glass.
Primero, use una batidora eléctrica para mezclar bien la mantequilla hasta que alcance una apariencia suave. Lo que lleva unos tres minutos.
Luego agrega el azúcar, la esencia y la leche hasta que alcance un punto más suave. También notarás que el color cambiará, volviéndose más blanco.
Si lo prefiere, puede agregar más azúcar, lo que hace que la crema de mantequilla sea más firme.
Después basta con utilizarlo con el apoyo de una espátula o manga pastelera.
5# Jarabe de fresa entre los mejores topping para dulces
El sirope de fresa es una opción de topping súper fácil y sorprendente, ideal para tartas y que puede estar presente en varias recetas, incluso como relleno.
Para esto, necesitarás:
- 1 bandeja de fresas, unos 300g;
- 1 taza de azúcar;
- Un trozo de piel de limón.
Al principio, lava bien las fresas y córtalas, pero déjalas en trozos más grandes.
Luego ponemos las fresas con el azúcar y el trozo de piel en una sartén ya fuego vivo.
Sigue mezclando sin parar hasta que alcances un punto cremoso, lo que toma alrededor de diez minutos.
Notarás que parte de las fresas, los pedazos más pequeños desaparecerán, y los otros pedazos serán más suaves.
6# Chantilly
Finalmente, una de las recetas más queridas en el mundo es la nata montada, que casi siempre viene con otros aderezos y rellenos.
Por lo tanto, necesitará:
- 350 g de nata bien enfriada;
- Media taza de leche;
- 3 cucharadas de azúcar, en promedio.
La preparación del chantilly es muy fácil, pero requiere constancia.
Entonces, comienza poniendo la crema en la batidora y comienza a batir, mezclando los demás ingredientes poco a poco.
Suele tardar unos diez minutos en llegar al punto ideal, que es cuando empieza a formar diseños, sin moverse.
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